Después de la tormenta...
Si bien es cierto que Everton ha cumplido, e incluso sobrepasado a nivel institucional, los objetivos fijados a principios de año, creo que no podemos dejar de pensar en ciertas falencias que se han hecho presentes durante este segundo semestre. Y es que la impresión que ha dejado el equipo en las últimas fechas no ha dejado indiferente a nadie, de hecho, el mismo Acosta se ha referido una y otra vez al rendimiento del plantel, culpando esencialmente a un relajo anímico y un cansancio acumulado.
¡Y cómo se ha notado! De hecho, es típico de la irregularidad del fútbol chileno que el equipo que ha cumplido una campaña notable o ha salido campeón, luego se relaje y simplemente “cumpla” para el campeonato siguiente, obviamente Everton no ha sido la excepción. En algún momento se llegó a hablar de que el equipo no podría ir a Playoffs debido a la mediocre campaña que estaba realizando, por suerte es el zorro viejo Acosta quien dirige el equipo y supo sacar algo de rendimiento en los momentos que más se necesitaba. Y es en este punto donde me quiero detener.
A pesar de saber que ya estamos peleando el repechaje, no dejo de pensar en que podríamos haber logrado un rendimiento óptimo como veníamos consiguiéndolo en las primeras fechas del segundo semestre, pero puntos van y puntos vienen, a final de cuentas nuevamente tenemos que sudar para entrar en la fase final, peor aún que debemos enfrentar a un equipo que viene muy agrandado, con un entrenador que a punta de huevos y garra ha logrado sacar a su equipo de la magra campaña en la que estaban enterrados. Creo que el cuerpo técnico pecó de inocencia (cosa rara con los años de experiencia que los avalan) al no fijarse antes en el agujero anímico al que se precipitaban los jugadores, y si se dieron cuenta al final, fue más como argumento para dejar tranquilos a los hinchas que una verdadera toma de responsabilidad al respecto, es más, aún no vemos al Everton campeón. Por otro lado, creo que también los hinchas nos hemos relajado en cuanto a las exigencias que deberíamos hacerle al equipo. Un completo mea culpa, porque en momentos de bonanza solo sabemos ver la parte positiva del asunto y no siento que hemos hecho la presión necesaria para que el equipo sienta no solo el respaldo de la hinchada, sino también las exigencias que ser campeón incluyen. No me imagino por ejemplo un Manchester united, manteniendo las proporciones del caso, campeón de Inglaterra que a la temporada siguiente termine en la mediania de la tabla y con su goleador, con cinco o seis goles en cartera, simplemente no sucede porque tienen un deber que cumplir tanto para su institución, su hinchada, las expectativas y para su propio honor futbolístico de mantener una regularidad que les proporcione la tranquilidad que los primeros puestos ofrecen en cualquier liga del mundo. No pido campeonatos consecutivos, no; no pido tener al “pichichi” de la liga cada semestre, no; no pido que Everton S.A.D.P. Invierta millones de pesos en una plantilla fenomenal, no. Lo único que pido es que Everton pueda mantener una regularidad que a largo plazo lo posicione como uno de los equipos grandes de Chile y si con eso viene incluido uno que otro campeonato nacional, mejor aún.
Ya estamos en posiciones de arranque para este otro torneo que se llama Playoffs, por ahora la tormenta de los resultados mediocres ha pasado porque hemos logrado un objetivo que es entrar a la post temporada, el público está tranquilo y seguramente los directivos dirán si perdemos “se ha cumplido el objetivo” o si ganamos “superamos las expectativas”. La cosa es que ganemos o perdamos ningún hincha sabe de papel los objetivos de Everton S.A.D.P, por lo que solo los medios de comunicación nos dirán si la tormenta vuelve o si reinará la tranquilidad.