Increíble despilfarro Viñamarinos ganaban por 3-1, pero su primer triunfo como visita se les fue de las manos en los últimos minutos del partido.
Lo realizado anoche por Everton dejó en evidencia una triste realidad: el peor enemigo que tienen los pupilos de Marcelo Espina no son sus rivales, sino que ellos mismos. Y es que pese a demostrar durante gran parte de los 90 minutos su superioridad futbolística, por culpa de imperdonables desconcentraciones se debieron conformar con un empate a tres goles que dejó un agrio gusto de derrota.
Ganaban por 3 a 1 en forma merecida y habían logrado soslayar sus ripios defensivos, pero en los minutos finales los hispanos dieron vuelta el resultado motivados por los espacios dejados en el mediocampo oro y cielo y por la increíble falta de eficacia de los visitantes frente al pórtico de Julio César Gaona.
La cuenta la abrió Manuel Neira a los 21' luego que Camilo Rozas y Cristián Gómez no pudieran controlar al escurridizo Luis Jara. Una ventaja inmerecida, porque los rojos poco habían mostrado sobre el campo de juego y tanto la iniciativa como el fútbol corrieron por parte del forastero durante los minutos iniciales.
Lo positivo es que los evertonianos no alcanzaron a sentir el golpe porque la igualdad llegó tan sólo dos minutos más tarde. Un centro desde la izquierda de Marco Estrada es dominado por Francisco Sánchez, quien cede a Daniel González que remata sobre el arco golpeando en una de las rodilla a Joel Estay. El desvío se fue directo al fondo del arco de Gaona para suerte del goleador.
El empate le permitió a los azulamarillos mantener su dominio territorial, ante una pasiva Unión Española, que demostraba con su ritmo de juego el avanzado promedio de edad que tiene su plantel. El 2 a 1 llegó luego que el lateral Omar Riquelme le cometiera penal al argentino Sergio Marclay, quien logró complementarse a la perfección con Estay. Cristián Uribe fue el encargado de ejecutar a los 30 minutos el lanzamiento desde los doce pasos y no falló.
Después de eso hubo por lo menos dos opciones más para los visitantes antes de irse al descanso. A los 34' Juan Pablo Toro casi convirtió un autogol de cabeza y a los 45' Marclay no logró conectar en plena área rival un centro de Estrada. Se llegaba al descanso con la sospecha de que la falta de finiquito la pagarían caro.
En el complemento, Unión reaccionó y gracias al ingreso de Vidangossi ganó en movilidad, sin embargo, cuando habían logrado ahogar a Everton en su área llegó a los 58' la tercera estocada auriazul a través de un impecable cabezazo del zaguero Javier Menghini luego de un córner de Emilio Hernández.
El defensa arreglaba así el grueso error cometido la semana pasada ante O'Higgins y ponía muy cerca del triunfo a sus compañeros. Pero esa ventaja fue también la causante de que se soltaran las marcas en mediosector y sus atacantes demostraran escasa capacidad para cerrar el partido con una goleada.
A los 66' se le anuló un gol por dudosa posición de adelanto de Joel Estay y a los 72' Marclay estrelló su remate en el horizontal.
Después de eso vino la debacle con el descuento de Luis Jara a los 85 minutos tras un tiro libre no despejado por la zaga viñamarina y la igualdad de José Luis Sierra a los 88', gracias a un ajustado remate de distancia.
Aún así Everton pudo ganar en los descuentos. Pero Ubeda, que entró para reemplazar a Estay sin éxito, mandó la pelota a las nubes cuando era más fácil convertir. El despilfarro había sido total.
El equipo del "Cabezón" mantiene así su triste registro de no sumar victorias fuera de Sausalito en el Apertura, lo que se une a las siete fechas sin conocer de triunfos en el torneo.
Fuente: El Mercurio de Valparaíso
Gino Henríquez / Domingo Retamal
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