El volante, que está a punto de fichar en Colo Colo, recuerda que "cuando perdíamos, nos tiraban piedras"Daniel Felipe González finalmente va a cumplir su sueño de ser contratado por un equipo grande.
El volante formado en las divisiones inferiores de Everton y que durante el último año defendió los colores celestes de Ohiggins de Rancagua, está a un paso de fichar por Colo Colo.
Su arribo al club popular es prácticamente un hecho y hoy siente capaz de cumplir las expectativas de los hinchas y dirigentes albos. "Tengo la confianza de cumplir una nueva tarea y realizar un buen trabajo en la Copa Libertadores, ya que es una buena vitrina para poder jugar en el extranjero", dijo el jugador.
El volante, que en poco días cumplirá 24 años, confiensa tener un especial cariño al club que lo vio nacer. Sin embargo, no olvida los pasajes ingratos que vivió, sobre todo cuando era jugador de la divisiones inferiores del clubviñamarino.
¿Cómo fueron sus inicios en Everton?
"Llegué cuando tenía trece años, por el año 1997 aproximadamente. Me llamaron para jugar un amistoso contra Wanderers en el estadio municipal de Villa Alemana. Ahí hice un buen partido y al tiempo después se comunicaron conmigo para entrenar en inferiores".
¿Es bueno el trabajo que hace en la cadetes viñamarinas?
"En estos momentos no sé como está, pero antes no era muy bueno. No había canchas, entrenábamos en el Sporting y cada uno tenía que llevar ropa, era muy desorganizado y poco serio. La parte técnica era buena, estaban Belisario Leiva, Jaime Baeza, "Chicho" García, nos trataba bien y siempre tenían disposición para enseñarnos. No así los dirigente".
¿Por qué lo dice?
"No nos pescaban mucho, nunca fueron a ver un partido".
Una vez que ascendió al primer equipo, ¿Cómo fue la relación con la dirigencia?
"No muy buena. Me fui porque no me querían arreglar el contrato, nunca se comunicaron conmigo siendo que yo era jugador del club, me mantenía ahí y no me querían arreglar mi situación económica. En ese momento tomé la decisión de irme".
¿Se sintió de lado por Everton?
"Sí, Yo pedí que me mandaran a préstamo a Ohiggins, en el Clausura del 2006, y después cuando volví hice un buen campeonato. Sin embargo , los dirigentes de Everton nunca se acercaron a conversar conmigo. En cambio los de Rancagua me llamaban todos los días y me pedían que volviera, así que vi mucho más interés en la gente de Ohiggins que en los de Viña".
Poco Cariño¿Y cómo era su relación con los hinchas viñamarinos?
"Fue rara. Los hinchas eran muy fríos, además como no son muchos, casi ni te conocen. Recuerdo que cuando perdímos, nos agarraban a piedrazos, más de una vez tuve que salir corriendo".
¿Siente acaso más cariño por la gente de Ohiggins que por la de Everton?
"En el poco tiempo que estuve ahí, el calor humano por parte de la gente y también de los dirigentes es muy grande. De los dos equipos en que he estado, siento más cariño por Ohiggins".
¿Cual fue el mejor y el peor recuerdo durante su permanencia en el cuadro oro y cielo?
"Creo que lo mejor fue todo lo que me enseñaron y el aprecio por una institución donde debuté. Y el peor, es cuando tomé la decisión de partir, no me valorizaron para nada cuando estaba en el equipo, solamente lo hicieron una vez que estaba en otro lugar".
¿Alguna vez sintió un reconocimiento de club?
"No, porque siempre traían jugadores del extranjero que recibían sueldos altísimos, mientras que a los de casa no les daban atención. Definitivamente no me sentí valorado por lo que hice en Everton".
Fuente: Mercurio Valpo
Foto Archivo.